En esta oportunidad queremos esclarecer el vínculo, en apariencia poco patente, que existe entre el estado histórico y actual de la carrera de Filosofía y el proceso reapertura de las carreras de Cs. dela Educacióny Cs. Políticas, ambas cerradas por la última dictadura militar. Estableciendo la relación entre ambos asuntos se evidencian las razones de nuestra participación en las sucesivas Asambleas de Humanidades que han sido convocadas en función de la mencionada reapertura.
La intención inicial de la gestión de nuestra facultad era la de aprobar a espaldas de la comunidad académica, en un mismo proyecto, la reapertura de Cs. de la Educación y Cs. Política, sin aclarar las condiciones en que estas carreras se irían a abrir, sin establecer de dónde provendría el presupuesto, sin socializar los planes de estudios y sin determinar el modo en que se designarían los docentes.
Desde que se inicia este proceso de lucha por la reapertura de las carreras los estudiantes decidimos congregarnos en una Asamblea de Humanidades, espacio de soberanía máxima y de decisión común, para proponer como pertinente la interrupción, en tanto medida provisional, de las sesiones del Consejo Académico. Esto se debe a que entendíamos que un órgano de decisión como el Consejo Académico no es democrático, dado que la composición numérica de representantes por claustros (docentes/graduados/estudiantes) es siempre favorable para la gestión docente de la Facultadde Humanidades y no a los estudiantes. Un proyecto de semejantes características, como es el que consiste en la reapertura de dos carreras, consideramos que no puede ser tratado en un ámbito de representación desproporcional y beneficiosa para el sector de la gestión, ya que excluye, por definición y naturaleza, a toda la comunidad académica que se ve involucrada en dicho proyecto.
En la ultima sesión extraordinaria del Consejo Académico que se realizo el día viernes 15 de este mes ( para acceder a la narración de los eventos entren aquí), los estudiantes permitimos que la sesión tuviera un normal desarrollo ya que nos presentamos con la propuesta, consensuada en la Asambleade Humanidades, que consistía en, por un lado, aprobar la apertura de las carreras y, por otro lado, en exigir que toda la comunidad universitaria tuviese la posibilidad de participar de la discusión sobre las condiciones de apertura de las carreras. Por lo tanto, se demandó que se realice una instancia pública donde se socialice la información y el proyecto que la gestión propone para que todos podamos acceder al mismo y para que podamos decidir en conjunto acerca del futuro de nuestra facultad.
Creemos que la participación de todos los estudiantes en este proceso es indispensable y, más aun, la participación de los estudiantes, graduados y docentes de filosofía, debido a que dicha carrera fue la primera que se reabrió desde la última dictadura militar. Y no es hecho menor que desde su reapertura (1994) sólo se han regularizado dos cargos del total de la plata docente, sólo se han designado a tres nuevos docentes, nunca se ha ampliado la oferta académica, siempre ha faltado voluntad política por parte de la gestión para que problemas como el de las bandas horarias sean solucionados, todavía no contamos con un doctorado en Mar del Plata, etc.
Con esto queremos poner de relieve la cuestión de que no solo es imperativa la reapertura de las carreras, sino que el cómo y en que condiciones se re-abren forman parte del misma demanda y necesidad.
Estudiantes, graduados y docentes consensuamos enla Asambleade Humanidades las siguientes reivindicaciones que consideramos básicas para la reapertura de las carreras:
Edificio único
Triplicación del presupuesto para:
Apertura de las carreras con presupuesto estatal
Concursos transparentes
Subsidio para el centro de copiados
Doble franja horaria
Cronograma: